En estas altas horas de la madrugada, tengo sentimientos encontrados con respecto a la decisión de volver a guardar las carbonillas y mi cuaderno de dibujo LEJOS de mi radio de alcance xD. Por alguna razón, me agrada ese estado indefinido entre saber que no solo tenés ganas de dormir, si no que tu cuerpo te lo pide a los gritos y el acto seguido de no hacer absolutamente nada sobre eso. En algunos casos, inducido por alguna sustancia derivada o anhelosa de derivar forzosamente de la cafeína, y en otros, por ácidos o marihuana. Pero lo curioso es que en la mayoría de las situaciones, esta ambigüedad del ser es auto producida, y a su vez, auto sostenida hasta el colapso. De cualquier forma, no tengo pensado dibujar absolutamente nada. Mis buenas ideas son efímeras.